La Lluvia de Hojas de hoy sale tarde como la luna. Pero busca no perder la disciplina de nuestro puntual satélite. En él se juntan, como siempre, reflexión poesía y relatos.
En la reflexión que abre el blog se revisa a un titulo personalísimo mi descubrimiento del haikú. Algunas acotaciones que no agotan el tema sino que sugieren un inicio del mismo.
Luego un relato de Un largo olor a muerto (1980) prosigue la experiencia. El relato ha sido revisado mas es el mismo en esencia del de aquel año.
Cinco haikú –no podían faltar- terminan la Lluvia de hoy. Es el ejemplo perfecto de lo que hablo en ese sentido.
Que el lector se refresque con esta suave lluvia de la noche.
No hay comentarios:
Publicar un comentario