domingo, 2 de enero de 2011

Reina de las Amazonas



Reina sobre todas las amazonas en lo profundo del barrio y en la avenida. Su andar de constante trajín revela un carácter moldeado por la necesidad de sobrevivir en medio de una prolongada y salvaje guerra cotidiana. Maneja las armas de fuego con la habilidad de una arquera con modales toscos. Pajizas, nueve milímetros, Uzis, cualquiera, larga o corta no tienen secretos para ella; también la daga oculta, el simple e improvisado chuzo en el que puede convertir cualquier metal con poca forja, la amenazante botella rota o la hojilla de afeitar son mortales es sus cicatrizadas manos.

Su adversario preferido es el hombre que pretenda dominarla. Le da vueltas para observarlo en sus debilidades y vencerlo de la manera más humillante. En su intento, se hace ayudar por otras mujeres de su banda. Sólo hasta la derrota del adversario. Después se aislará, reapareciendo al tiempo para reemprender su cacería.

No la afecta porque le griten que su actividad es delictiva. Se ríe porque sabe que su arte marginal es incomprendido por los que viven sometidos por normas ajenas. Disfruta del miedo propio y de extraños casi hasta la embriaguez. Dice sólo tener emociones pues los sentimientos los sepultó con sus padres.

Pero hoy, cuando ataca a un delgado joven, una lágrima abre un olvidado surco en su faz. No porque le moleste herirlo, sino por la flor estrujada que le regala como último suspiro.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Excelente escrito y con un cierre inesperado. Te felicito.

Beatriz Alicia García Naranjo dijo...

Coincido, excelente, lo voy a twittear. Breve y sustancioso.